Esta película la puedes poner justo al lado de The Matrix
o cualquier otra relacionada al quiebre de los límites aparentes de la
realidad. Esto porque trata precisamente de la ansiedad y estrés que
puede producir el sentir que algo va mal con la vida normalita que
tienes, especialmente si tu relajado día a día en zonas alejadas de las
grandes ciudades se transforma de repente en un viaje agobiante por instalaciones
militares de dudosa reputación legal, en dónde además se te trata como
una rata de laboratorio.
A diferencia de otras películas de género similar LA SEÑAL
tiene la particularidad de mostrar el lado más psicológico del quiebre
que puede sentir una persona al verse en una situación desconocida y
totalmente distinta a la que está acostumbrado desde su niñez. El guión
se desenvuelve y guarda perfecta relación con la mítica Historia del Héroe
y la forma en que él debe descender al Infierno (mental) para descubrir
una parte de sí mismo. Digo descender porque literalmente eso es lo
que ocurre en gran parte de la película en dónde el protagonista baja a
zonas subterráneas y experimenta un verdadero shock al darse cuenta
sin saber cómo ni porqué que algo ha cambiado en él para siempre. Todo
esto expresando a la perfección la agresividad y profunda catarsis que
puede ocurrir durante el proceso de Iluminación o Apertura de Conciencia.
Si Neo vomita en Matrix, lo que le sucede al chico de la película es
igual de potente e impactante: el momento preciso en dónde de un
guantazo da un salto de conciencia a una nueva verdad.
LA SEÑAL te invita a experimentar junto con su protagonista el verdadero sentir de alguien que abre su mente a la verdad de su propia vida y destino. Te sumerge en el miedo, la ansiedad y la profunda resistencia a saber lo que se oculta detrás de tus dudas. Te hace cuestionar si es realmente positivo saber todo lo que se mueve más allá de tu aparente vida normal y por lo mismo es un desafío. Un manifiesto potente que levanta cuestionamientos sobre el sistema actual de cosas ¿Es esta vida que tengo algo que realmente yo elegí? ¿Quién o qué nos gobierna realmente? ¿Es la experiencia en esta Tierra solo un fractal de una pequeña maquinaria universal que es imposible de sondear y comprender a cabalidad?
De repente te ves a ti mismo dentro de una matrioska, esas particulares y clásicas muñecas rusas que traen dentro otra muñeca que su vez trae otra muñeca más péqueña. Esto como símbolo de los límites que vas cruzando en el camino a la verdad y que te llevan a saltar de un nivel a otro de percepción, enfrentándote a cuestionamientos y verdades que como las matrioskas dan paso a formas más grandes e impactantes que la anterior. Justamente lo que nuestro querido, mareado y rabioso protagonista experimenta en el gran cierre final, terrorífico para algunos y para otros un paso más en la superación de nuestros propios límites mentales.
PD: Debo confesar que la primera vez que ví el trailer pensé que esta película era un bodrio. Luego y meses después repetí el visionado del trailer y sucedió lo increíble: sentí que debía verla pese a mi juicio prematuro. Grande fue mi sorpresa al descubrir lo que traía la película. Una razón más para dar validez a la frase "Las apariencias engañan".
Puedes echarle un vistazo al trailer, a ver si te convence...
LA SEÑAL te invita a experimentar junto con su protagonista el verdadero sentir de alguien que abre su mente a la verdad de su propia vida y destino. Te sumerge en el miedo, la ansiedad y la profunda resistencia a saber lo que se oculta detrás de tus dudas. Te hace cuestionar si es realmente positivo saber todo lo que se mueve más allá de tu aparente vida normal y por lo mismo es un desafío. Un manifiesto potente que levanta cuestionamientos sobre el sistema actual de cosas ¿Es esta vida que tengo algo que realmente yo elegí? ¿Quién o qué nos gobierna realmente? ¿Es la experiencia en esta Tierra solo un fractal de una pequeña maquinaria universal que es imposible de sondear y comprender a cabalidad?
De repente te ves a ti mismo dentro de una matrioska, esas particulares y clásicas muñecas rusas que traen dentro otra muñeca que su vez trae otra muñeca más péqueña. Esto como símbolo de los límites que vas cruzando en el camino a la verdad y que te llevan a saltar de un nivel a otro de percepción, enfrentándote a cuestionamientos y verdades que como las matrioskas dan paso a formas más grandes e impactantes que la anterior. Justamente lo que nuestro querido, mareado y rabioso protagonista experimenta en el gran cierre final, terrorífico para algunos y para otros un paso más en la superación de nuestros propios límites mentales.
PD: Debo confesar que la primera vez que ví el trailer pensé que esta película era un bodrio. Luego y meses después repetí el visionado del trailer y sucedió lo increíble: sentí que debía verla pese a mi juicio prematuro. Grande fue mi sorpresa al descubrir lo que traía la película. Una razón más para dar validez a la frase "Las apariencias engañan".
Puedes echarle un vistazo al trailer, a ver si te convence...
Aquí abajo comparto la imagen de las matrioskas. La muñeca más grande contiene dentro de si misma a la que le precede en tamaño y así sucede con el resto hasta llegar a la más pequeñas. Al final lo que tienes es una muñeca grande con muchísimas muñecas dentro de sí misma. Eso mismo es lo que ocurre con la verdad que experimentamos, tanto en la película como en nuestras vidas cotidianas: nuestra pequeña realidad está contenida dentro de realidades más grandes y vamos saltando de un nivel de percepción a otro, tomando conciencia de todas las muñecas.
NOTA: Si quieres revisar más películas con su respectiva explicación y trailer ve al apartado de categorías de este blog y haz clic en la sección Descifrando Películas.
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